El Vértigo no es una enfermedad, sino un síntoma que reconoce etiologías múltiples, una percepción de un movimiento que no existe, siendo mas frecuentemente de rotación o de giro de nuestro cuerpo o del ambiente que nos rodea.
La sensación de Equilibrio es el resultado de una información apropiada detectada por los receptores vestibulares, oculares y propioceptivos, que es integrada adecuadamente en el cerebelo y en el resto del sistema nervioso central (SNC).
Un modo de andar, una postura y un enfoque visual adecuados durante el movimiento de la cabeza, dependen de un estado de equilibrio intacto.
El Vértigo y las Alteraciones del Equilibrio repercuten de forma importante en la calidad de vida de las personas.
Disponemos en la actualidad de instrumentos eficaces para realizar una evaluación completa del Vértigo y del Equilibrio, identificando también a los individuos con un alto riesgo de caídas.
Y también diseñar estrategias preventivas (clínicas, rehabilitadoras…)a fin de mejorar el equilibrio, la estabilidad y reducir el riesgo de caídas.
Disponemos de las últimas técnicas diagnósticas y de rehabilitación del equilibrio
Todo ello destinado tanto al diagnóstico del vértigo y las alteraciones del equilibrio, como a su rehabilitación y estudio del vértigo en el anciano.